Desarrollo personal · febrero 5, 2024

Si volviera a nacer…

En el taller de escritura que estoy realizando, se nos proponía en la última clase, que escribieramos sobre el siguiente tema: Imagina que tienes que marchar de este mundo en veinticuatro horas… ¿Que cosas lamentarias no haber hecho?

Es un ejercicio que nos dá para reflexionar. Te propongo que cojas lapiz y papel o teclado y pantalla, y te pongas a ello. Y despues de ese «reseteo» personal, lo positivo es que no tienes ese tiempo limitado de veinticuatro horas. Aunque si tenemos una fecha de caducidad, y está bien tomar conciencia de ello, todavía tenemos tiempo por delante para rectificar, cambiar de rumbo y mejorar.

Una enfermera australiana llamada Bronnie Ware, experta en cuidados paliativos, quiso compartir su experiencia observando el comportamiento de muchas personas al final de la vida. Describió cinco aspectos que la gente más cambiaría, si pudieran tener la oportunidad de volver a vivir:

  • «Ojalá hubiese tenido el coraje de vivir la vida que yo quería y no la que los demás esperaban de mí». Este es el remordimiento más común. Cuando miramos atrás y vemos los sueños que no hemos realizado.
  • «Ojalá no hubiera trabajado tanto». Este comentario lo repetian la mayoría de los hombres a los que asistió. Se arrepentian de no haber dedicado más tiempo a su pareja y a sus hijos.
  • «Ojalá hubiese tenido el coraje de expresar mis sentimientos». Muchas personas esconden sus sentimientos para evitar conflictos y esto les impide ser fieles a sí mismos.
  • «Ojalá hubiese mantenido el contacto con mis amigos». En los últimos momentos de la vida lo que más importa es el amor y las relaciones que hemos mantenido con las personas más cercanas.
  • «Ojalá me hubiese permitido ser más feliz». Este remordimiento también es muy común. Muchas personas no se dan cuenta hasta el final de que la felicidad es una elección y se quedan trabados en viejos patrones y hábitos.

Aquí comparto un escrito donde se expresan deseos que quedan por realizar, cuando aún se dispone de tiempo para materializarlos:


¨Quiero volver a nacer y empezar de nuevo. No importa la edad. Quiero aprender de mis errores para cambiar de rumbo y darme la oportunidad de corregirlos. Si volviera a empezar aceptaría mis imperfeciones. Me querría más a mi misma. Me cuidaría más. Me alejaría de las personas que no me valoran, que me hacen daño. Diría NO más a menudo, pondría límites. No aceptaría situaciones que me hieren. Desarrollaría mi autoestima. Me amaría a mi misma en lugar de buscar que me amen. Me escucharía más. No esperaría a mañana para hacer lo que tengo que hacer hoy. Me permitiría soñar, pero siempre que me ponga en marcha para realizar mis sueños. No me quedaría parada al borde del abismo, extendería mis alas y me lanzaría dejándome llevar por el viento… No me permitiría vivir con tristeza ni amargura, simplemente porque no lo merezco. Merezco ser feliz y vivir con ilusión, alegría y plenitud¨.

Anónimo

No tenemos que esperar volver a nacer para realizar los sueños. Cada día podemos empezar de nuevo. Abrir los ojos, dar gracias por la página en blanco que nos ofrece cada amanecer y escribir esa página con los momentos únicos e irrepetibles que nos quedan por vivir.

¨No hay que temer a la muerte, sino a no haber empezado nunca a vivir¨

Marco Aurelio